Asociación Vecinal Uribitarte Anaitasuna

Descargar presentación entregada a los medios de comunicación

La Asociación Vecinal Uribitarte Anaitasuna ha realizado un estudio sobre los niveles de ruido en el distrito de Abando, centrado en el ruido causado por actividades de ocio y consumo. El estudio llevado a cabo en las calles con alta concentración de locales de ocio, nos permite concluir lo siguiente: la media de los valores mínimos supera el máximo permitido por la ley, y la media de los valores máximos alcanza niveles que la OMS considera perjudiciales para la salud.

Desde 2017, la Asociación Vecinal Uribitarte Anaitasuna  ha venido pidiendo reiteradamente información sobre la contaminación acústica sufrida por los residentes de los barrios de Abando e Indautxu.

• Sólo se publican los datos de diez de los 31 puntos de instalación de sonómetros en Abando.
• Los datos publicados en GEOBILBAO desaparecen a los 15 minutos
• En Open Data hay un mayor acceso a los datos, pero éstos están en un formato que dificulta enormemente su procesamiento. Hay aproximadamente 100.000 registros en tres formatos de difícil procesamiento. Los datos contenidos en este repositorio ofrecen las mediciones de los últimos 30 días y se renuevan diariamente

Frecuentemente hay, además, sonómetros en revisión y que, por lo tanto, no ofrecen datos.

Todo esto hace pensar en una estrategia de desinformación por parte del Ayuntamiento, en la que se facilitan los datos, pero se dificulta al máximo poder establecer conclusiones a partir de los cálculos estadísticos pertinentes.

Las reiteradas peticiones de información por parte de nuestra Asociación tuvieron su fruto a finales del año pasado, cuando desde el Ayuntamiento se remitió a Uribitarte Anaitasuna los datos de los 31 puntos de instalación de sonómetros en el Distrito 6 (Abando-Indautxu). El período comprendido en las mediciones abarca desde principios de 2020 hasta el 31 de octubre de 2023, aunque de algunos sonómetros sólo se facilita información correspondiente a 2023.

Datos recibidos 

El Ayuntamiento ha enviado las lecturas de las mediciones efectuadas en 31 ubicaciones de sonómetros del Distrito 6, cuya localización se puede ver en el mapa adjunto.

Las mediciones se enviaron en un archivo separado por cada punto de toma de datos (31 en total) con la siguiente información para cada uno de ellos:

• Día y hora de la medición, con una cadencia de 15 minutos.
• Promedio de los valores medidos durante esos 15 minutos, ya que la medición es continua

La media de registros recogida en los archivos facilitados por el Ayuntamiento es de 50.000 registros (oscilan entre 20.000 y 90.000). Esto se debe a las diferentes fechas en las que se han comenzado a hacer mediciones en cada uno de los puntos de instalación de los sonómetros. Todas ellas finalizan el 31 de octubre de 2023.

Metodología seguida en el procesamiento de los datos

Un equipo de miembros voluntarios de la Asociación ha desarrollado la tarea de procesar la información contenida en los 31 puntos de toma de datos, lo que supone algo más de millón y medio de registros , y ha seleccionado, para dar una imagen más clara de la situación, cinco sonómetros, ubicados en lugares clave en función del problema a analizar. Los datos se han acotado a los días de la semana en que los niveles de ruido son más altos: viernes, sábados y domingos de 2023.

Las cuestiones en las que se centra el informe son

• Ocio nocturno: se han elegido los sonómetros ubicados en la calle Uribitarte 6 (discotecas Stage y Backstage), frente a la iglesia de San Vicente (Antzoki), e Ibáñez de Bilbao (frente al Azkena)
• Uso abusivo del espacio público: se han estudiado las mediciones de los sonómetros situados en Ledesma 7 y Licenciado Poza 53

Quedan fuera del objeto de este estudio otro tipo de molestias que sufre el vecindario de las zonas donde se ha hecho el análisis, como la suciedad, la inseguridad o la dificultad de tránsito, dado que los consumidores llegan a bloquear totalmente las aceras, y la imposibilidad en algunos casos de acceder a sus domicilios.

A partir de las mediciones facilitadas por el Ayuntamiento, los autores del estudio han obtenido tres medias, de valores mínimos de sonido, de medios y máximos de sonido que se pueden producir por diversas razones. Esos valores se contraponen con los límites establecidos por la Ordenanza de Protección de Medio Ambiente de Bilbao, de 55dB máximo por la noche (entre 23:00 y 7:00 horas) y 65dB durante el día.

Pues bien, los gráficos permiten comprobar cómo en las noches de viernes a sábados y en la de los sábados a domingo, los valores medidos se sitúan muy por encima de los recogidos en la Ordenanza Municipal de Protección de Medio Ambiente. Incluso los valores mínimos superan ampliamente esos valores. Es lo que ocurre en zonas de la villa como la calle Uribitarte, la calle San Vicente o Ibáñez de Bilbao, en los puntos en los que están instaladas algunas de las discotecas de la ciudad. Sin embargo, el gráfico permite comprobar que esas calles son zonas tranquilas durante el día, a pesar de ser vías de conexión de cierta importancia para el tráfico de la ciudad.

En otras zonas, la actividad de ocio se traslada a las horas diurnas o de la tarde-noche. Es el caso de la calle Ledesma, sobre todo en su parte media y superior y de la calle Licenciado Poza, entre el cruce con Gregorio de la Revilla y el cruce con Doctor Areilza. 

En Ledesma, la contaminación acústica es causada por la proliferación de terrazas y los niveles máximos permitidos de ruido se superan durante casi todo el fin de semana, excepto las tardes de los domingos, cuando muchos de estos establecimientos cierran. El 70% del tiempo el ruido en la calle Ledesma supera los 65dB.

En el caso de la calle Licenciado Poza nos encontramos, además, con el fenómeno de la ocupación de la vía pública por parte de los clientes de los bares hasta el punto de impedir, en determinados momentos, la circulación de vehículos. En días de partido en el campo de San Mamés, la Policía Municipal se limita a cortar el tráfico para que los clientes de los bares puedan consumir sus bebidas tranquilamente sin ser molestados por los automóviles. Los niveles de ruido en dicha calle superan los 80dB, llegándose en algunos momentos a los más de 95dB, que es el límite, según la OMS a partir del cual la exposición al ruido puede causar daños a la salud.

Conclusiones

Creemos que el estudio demuestra que la contaminación acústica es un hecho de especial relevancia en la ciudad y que genera un impacto negativo serio en la calidad de vida y la salud del vecindario, con sus consecuencias a largo plazo de desocupación y degradación de determinadas zonas.

También creemos que el Ayuntamiento, que cuenta con medios muy superiores a los de esta Asociación, ha llevado hasta ahora una política de ocultamiento y falta de atención a este problema. No ha publicado los resultados de las mediciones de los sonómetros, no ha implementado ninguna medida provisional para paliar la contaminación acústica, a pesar de las reiteradas peticiones por parte del vecindario, y, lo que es peor: sigue concediendo licencias sin estudiar el impacto ambiental de las mismas. Así, vemos cómo la densificación de la actividad hostelera se va extendiendo a nuevas zonas, como las calles Heros, Henao y Ajuriaguerra.

Por nuestra parte, pensamos que, más allá de la elaboración de estudios que nunca se concluyen ni llegan a conclusión alguna, es urgente la adopción de medidas efectivas ante un problema como éste, que afecta a la salud y al patrimonio de la ciudadanía.

Bilbao, a 15 de febrero de 2024.

Subir